Siguiendo al Buen Pastor: La Vara y el Cayado en Nuestra Vida Cristiana (Salmo 23:4)


En el vasto panorama de la vida, somos comparados con ovejas confiadas al cuidado de un pastor. Este pastor no es un simple observador; lleva consigo una vara y un cayado, herramientas cruciales para nuestra seguridad espiritual y el avance del evangelismo.

La vara, símbolo de autoridad y protección, no es para maltratar a las ovejas, sino para ahuyentar a la serpiente, al lobo y abrir camino. De manera análoga, en nuestras vidas, enfrentamos desafíos espirituales y obstáculos que amenazan nuestra fe. La vara representa la autoridad de Cristo, quien nos defiende y allana el camino para que podamos avanzar con confianza en el evangelismo.

El cayado, con su extremo en forma de gancho, se utiliza para traer de vuelta a las ovejitas que se desvían del camino. En nuestra travesía cristiana, nos enfrentamos a distracciones y desviaciones que podrían apartarnos de la senda correcta. El cayado simboliza la dirección amorosa de nuestro Buen Pastor, que nos guía de vuelta al camino de la verdad y nos infunde aliento para perseverar en nuestra misión.

Juan 10:4 revela la íntima relación entre Jesús y nosotros como ovejas. Cuando el pastor saca a todas sus ovejas al campo, nos enseña que no debemos confinarnos en nuestros propios rediles. Salir al campo, participar en el trabajo misionero, fortalecerá nuestra fe y nos preparará para enfrentar cualquier tribulación.

El pastor, que va adelante de las ovejas, lidera con la vara y el cayado en mano. Él no solo empuja desde atrás, sino que va delante, abriendo el camino, ofreciendo seguridad y protección. Así, nuestro líder, Jesús, nos invita a seguirlo, confiando en que Él nos guiará y protegerá en nuestra jornada cristiana.

En este viaje espiritual, la voz del pastor es vital. Las ovejas conocen la voz de su pastor, relacionándola con amor, protección y alimento. En un mundo lleno de confusión, escuchar la voz del Buen Pastor a través de la lectura de la Biblia se vuelve esencial para evitar la confusión y reconocer la verdad.

En Juan 10:11, Jesús proclama: "Yo soy el buen pastor; el buen pastor da su vida por las ovejas". En tiempos desafiantes, Él nos exhorta a evaluar nuestra relación con Él. Al estudiar la Palabra y comprometernos con el trabajo misionero, expresamos gratitud al Buen Pastor y fortalecemos nuestra conexión con Él.

En nuestras pruebas, recordemos que tenemos un Ayudador constante. Aunque no podamos verlo, la fe nos permite escuchar Su voz reconfortante. Mantengamos la mirada en el Buen Pastor, quien conoce nuestras lágrimas, luchas y tentaciones.

Hoy, decidamos buscar una relación más estrecha con Jesús. Comprometámonos a estudiar Su Palabra y llevar a cabo el trabajo misionero como parte fundamental de nuestro estilo de vida. Sigamos al Buen Pastor, confiando en que, a pesar de las pruebas, Él está con nosotros. Que esta decisión inspire a otros a seguir el mismo camino. Que Dios nos bendiga en nuestra jornada espiritual.




Por: Gerson Vega

En el valle de la muerte (Salmo 23:4)


No sabemos cuánto tiempo la ovejita estuvo esperando...
Pero la ayuda llegó.
¿Cuántas veces te sentiste así?

Cuando he pasado por problemas muy difíciles, y me intrigaba la manera en que Dios va a responder;
mirando al cielo oraba así: "¿dónde y cómo estaré de aqui a un año?, ¿cómo míraré esto que paso?
solo te pido paciencia, y sabiduría, gracias por estas pruebas, porque me permiten estar más aferrado a ti".

Debemos agradecer a Dios por las pruebas.
En estos tiempos del fin las pruebas son el pan de cada día.

En la biblia encontramos muchas recetas para resistir las adversidades. Pero la que más me gusta y me ha ayudado mucho, es esta:

"Pero tú vela en todo, soporta las aflicciones, haz la obra de evangelista, cumple tu ministerio" 2Timoteo 4:5 (puedes leer todo el capítulo 4 es muy bueno).

Mientras uno está ocupado cumpliendo la Misión (Mateo 28:19-20), haciendo el trabajo misionero, entonces no habrá espacio en la mente para pensar en a aflicción, depresión, etc.

Velar es igual a "esperar en Jehová",  No se puede esperar sentado. NO!
la manera de esperar es "Haciendo el trabajo misionero", "La obra de evangelista" "Ganar almas para Cristo".

"pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán". Isaías 40:31

Mientas esperamos el retorno de Jesús, Dios nos dio la tarea de hacer discípulos y llevarlos a que tomen la decisión de entregar su vida a Jesús por medio del bautismo.

Al cumplir esta tarea, Dios nos fortalece, tenemos la promesa de que nuestras fuerzas serán renovadas. (esta tarea es para todos, no solo es para pastores o lideres de iglesia, es para ti también)
Cuando he compartido a Jesús, las personas me contaban su problema, y la angustia de ellos era mucho mayor que la mía. Seguramente a ti tambien te ha pasado. Es como si Dios te dijera claramente.
"tienes hermanos que están en peor situación y Yo estoy con ellos. Tu problema no es tan difícil como piensas, además no hay problema que Yo no pueda resolver, porque nada es imposible para Dios".

Mi Decisión

  • Señor, gracias por las pruebas que me ayudan a estar más aferrado a ti, sé que la ayuda llegará, ayúdame a ser paciente.

  • Señor, quiero compartir a Jesús y estar ocupado cumpliendo la Misión, que ningún problema distraiga mi mirada de ti, hoy hablaré de ti a muchas personas úsame como un poderoso evangelista.
Si has tomado esta decisión, te invito a
que compartas este mensaje para que otras personas puedan ser bendecidas. que Dios te bendiga.

La Preparación del Niño Predicador: Forjando Voces Profundas en Fe y Compromiso

Introducción: En el seno de la iglesia, cada generación ve surgir nuevas voces, incluso entre los más jóvenes. La preparación del niño pred...